sábado, 26 de noviembre de 2011

Qué nos dicen los colores?



Posiblemente, cuando abrimos los ojos en la mañana pensamos en que atuendo usar para el día que nos espera, quizá comenzamos a hacer una lista de las tareas que tenemos pendiente, algunos piensan en si el día estará soleado o mostrara su cara gris y quizá haya quienes solamente prefieran sumergir su rostro en la oscuridad de sus mantas ignorando la belleza y la fuerza que espera fuera de ellas. Es allí precisamente donde comienza la magia que día a día nos rodea, nos abraza, algunas veces nos invita y en otras nos rechaza y sin saberlo nos sumergimos en ella desde el momento en que nuestros ojos son capaces de captar la luz y proyectar el espectro electromagnetico a nuestro cerebro quien lo interpreta como color y aunque no lo creamos esta radiación luminosa tiene la capacidad de influir de forma positiva o negativa en nuestro estado de animo.

Por la gran importancia que tiene del color en cada momento de nuestra vida, por su definitiva incidencia en nuestro colorido universo y en el tuyo, Saros dedica este pequeño espacio al color. Saros iluminaciones también es color y lo mejor "tienes de donde escoger"


EL COLOR EN LAS ACTIVIDADES HUMANAS

Maurice Déribéré



Los efectos psicológicos son de diversos tipos. Los directos son los que hacen que un objeto o ambiente parezca alegre o triste, ligero o más pesado, caliente o frío. Los indirectos tienen su origen en relaciones afectivas y en asociaciones subjetivas u objetivas nacidas bajo el efecto del color.
El papel psicológico del color implica que hay que tener en cuenta el lenguaje de los colores. También hay que considerarlo en relación con la luz, pues puede influir en el individuo por su matiz, caliente o frío.
Colores calientes o fríos
Suelen considerarse colores cálidos el naranja, rojo y amarillo, y fríos el azul y el violeta. Estas luces producen en efecto estas sensaciones. La sensación de frío o calor queda fuera de todo efecto térmico real. Se trata sólo de un efecto psicológico.
Colores alegres o tristes, dinámicos o calmantes.- La calidez y la frialdad atienden a sensaciones térmicas. Los colores, de alguna manera, nos pueden llegar a transmitir estas sensaciones. Pensemos en un caluroso día de verano. La luz que se proyecta sobre las cosas tiene unos matices ocres, rojizos, amarillentos. Estos colores nos evocan el calor. Pensemos en un frío día de invierno. Los colores grises, azulados y tonos pálidos nos recuerdan el frío. De esta manera podemos identificar los colores que nos sugieren una u otra sensación. También a la hora de mezclarlos podemos conseguir estas sensaciones. Dos colores "calientes" mezclados entre sí producirán una sensación cálida. Lo mismo ocurrirá con los colores fríos. Pero también podemos "calentar" o "enfriar" un color combinándolo con uno del tipo contrario. El color azul puede ser "calentado" añadiendo tonos rojizos y ocres para hacer las sombras y las luces. Podemos "enfriar" el rojo añadiendo azules y grises. La mejor forma de observar esto es con la práctica.


Poder de los colores.

 Vamos a especificar el carácter psicológico de cada color individualmente.

El rojo es el color que produce el calor. Aumenta la tensión muscular y es causa de una tensión sanguínea más alta y una respiración más intensa. Impulsivo, activo, simpático.

El anaranjado es ardiente y brillante. Es estimulante y calmante, puede irritar o calmar. Sociable, amable, luminoso.

El amarillo es la luz solar. El color del buen humor y la alegría. Calma estados de sobreexitación nerviosa. Intelectual, idealista, filósofo.

El verde es calmante y tranquilizador. Es el color de la naturaleza. Es fresco y húmedo. Induce a los hombres a ser pacientes. Comprensivo, tolerante sensitivo.

El azul es el color que se asocia al agua y el cielo. Es claro, fresco y transparente. Disminuye la presión sanguínea y baja el pulso y la respiración. Inspira paz e introspección. Conservador, sensitivo, serio, precavido, moderativo, concienzudo.

El púrpura también es calmante y algo melancólico. Su calidad es delicada, fresca y aérea. Extraño, misterioso, artista, crítico, maligno.

El negro, empleado solo es deprimente, pero combinándolo, es útil para crear contrastes. Ligero, sofístico.

El blanco, símbolo de pureza, es frío si se le asocia al rojo, amarillo o anaranjado. Gentil, limpio.

El castaño reposa pero produce depresión si se abusa de él. Debe asociarse al amarillo o al naranja. Sosegado, perseverante.